Destacado Principal
Economía
Sin subir el IVA y sin quitar los subsidios, la dolarización corre peligro
Economistas advierten de las medidas urgentes que se deben tomar en medio de la crisis fiscal y miran al país en el espejo de Zimbabue
El directorio de Cordes brindó una rueda de prensa para explicar la situación económica del país / Foto: cortesía La República
Quito- Un desenlace desolador. La dolarización ecuatoriana se ve amenazada por una crisis fiscal sin precedentes y, por esta razón, se deben tomar medidas urgentes. Esa es la mirada de grupos de economistas que recomiendan medidas consideradas impopulares para evitar un desastre económico de grandes proporciones.
En ese sentido, la Corporación de Estudios para el Desarrollo (Cordes) exhorta a la Asamblea Nacional a aprobar el incremento del Impuesto al Valor Agregado (IVA) del 12 al 15 %, que fue propuesto por el presidente Daniel Noboa. Además, dice Cordes, el gobierno también debe revisar los subsidios a los combustibles, específicamente al diésel y a las gasolinas Extra y EcoPaís.
Incluso, tomando esas medidas, el gobierno no logrará cerrar el hueco de recursos que tiene actualmente: $ 5.000 millones de déficit fiscal y $ 5.000 millones en pagos atrasados a proveedores y entidades del Estado. Es decir, un agujero de $ 10.000 millones. El aumento del IVA y la focalización de los subsidios pueden dar un alivio de unos $ 4.000 millones.
Por esta razón, además de las medidas, el Gobierno de Noboa deberá ajustar los gastos y pedir ayuda a los organismos multilaterales para conseguir unos $ 4.000 millones para cerrar la gran parte del agujero.
¿Qué pasa si no se toman esas acciones? Simplemente, la dolarización peligra. Si el gobierno ya no cuenta con dólares tendrá la tentación de emitir “ecuadólares”, una moneda paralela que podrían ser papeles, pagarés o, de lleno, un nuevo sucre, para poder cubrir sueldos u otros gastos del Estado para así poder brindar servicios básicos mínimos, señaló Abelardo Pachano, parte del directorio de Cordes.
Es decir, la economía ecuatoriana entrará en un bimonetarismo: dólares en circulación más los pagarés u otra moneda que emita el Estado, que se devaluarán. Algo parecido con lo ocurrido con los patacones en Argentina a inicios de los 2000, en su crisis monetaria.
Augusto de la Torre, execonomista en jefe del Banco Mundial para América Latina y también miembro del directorio de Cordes, mira a Ecuador en el espejo de Zimbabue. El país africano se desdolarizó a través de un proceso gradual.
Originalmente, adoptaron el dólar estadounidense en 2009 para estabilizar su economía, afectada por hiperinflación. Sin embargo, en 2019, enfrentando escasez de dólares y presiones económicas, introdujeron su propia moneda, el dólar zimbabuense. Esta desdolarización se realizó para recuperar cierto control sobre su política monetaria y enfrentar desafíos financieros internos. Aunque buscaban independencia económica, la efectividad a largo plazo aún es un desafío.
En 2023, Zimbabue y Sudán ocupaban la segunda y tercera posición del ranking mundial de países con la tasa de inflación más alta, ambos con valores superiores al 200 %.
Síguenos en: