Opinión

¿Por qué los ecuatorianos deben decidir sobre la explotación del Yasuní?

21/06/2023 El Oriente - Luis Espinosa Goded

Lo primero que nos tenemos que preguntar es ¿por qué tenemos que votar todos sobre esto?

Hola buenas.

El próximo 20 de agosto los ecuatorianos tenemos que votar no solo al presidente y los asambleístas, sino también si queremos que el petróleo que está bajo la reserva, Yasuní ITT, permanezca bajo tierra o se explote.

Y lo primero que nos tenemos que preguntar es ¿por qué tenemos que votar todos sobre esto? Bueno, pues porque de manera bastante cuestionable, el Estado ecuatoriano se adjudica la propiedad de todos los recursos naturales del país.

Por tanto, si yo soy propietario de un terreno legítimo, propietario de un terreno, no lo soy. Como dice el derecho romano “ad coelum et ad ínferos”, es decir, hasta el cielo y hasta los infiernos de ese terreno y de todo lo que hay por arriba y para abajo.

No, soy propietario de ese terreno, pero si hay recursos naturales se los adjudica el Estado ecuatoriano. Y eso lo tenemos que preguntar, porque es en primer lugar profundamente injusto.

Todas las discusiones sobre si hay que hacer minería, hay que explotarlo en tal o cual lugar., solo proceden porque el legítimo propietario del terreno no puede decidir sobre si quiere que se explote o no. Sea este propietario una persona particular, o sea este propietario una comunidad indígena por derecho o usucapión ancestral.

Y en segundo lugar, nos tenemos que preguntar ¿y ahora que tenemos que tomar la decisión entre todos los ecuatorianos, cómo vamos a tomar esa decisión?

Pues esto es un análisis meramente lógico y racional. Tendremos que evaluar si lo que hay en ese terreno vale, pongamos un dólar, evidentemente no merece la pena explotar los recursos naturales del Yasuní.

Pero si lo que hay en ese terreno valiese $ 10 mil millones de dólares o $ 100 mil millones de dólares al año, ¿también diríamos que no lo explotaríamos?

Por eso, en el video siguiente haremos un análisis racional de esa cuestión.

Gracias