Minería, un desafío para la mujer ecuatoriana

Ecuador se encuentra dentro de los 80 países con menores tasas de equidad de género. Sin embargo, nuestro país está mejor posicionado que Colombia (59) y Perú (62)

Minería, un desafío para la mujer ecuatoriana/ Foto: IIGE

Carla Carabajo, Técnico del proyecto “Mejoramiento de las condiciones de trabajo en la pequeña minería y minería artesanal” IIGE.

El Plan Nacional de Desarrollo del Sector Minero 2020-2030, prevé que la industria minera tendrá un papel relevante en la economía ecuatoriana mediante el incremento de la participación de esta actividad en el Producto Interno Bruto (PIB), la generación de empleo y la atracción de inversiones nacionales y extranjeras; lo que aportará a la sostenibilidad del modelo económico del país. De acuerdo con cifras del Ministerio de Energía y Recursos Naturales No Renovables, los productos mineros en febrero de 2021 alcanzaron el tercer lugar en las exportaciones no petroleras, con 210 millones de dólares en ventas, lo que representó un incremento del 85% en comparación con el mismo periodo en el año 2020. 

La industria minera en Ecuador ha sido masculinizada. De acuerdo al Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) Ecuador, en el cantón Camilo Ponce Enríquez (Azuay), existen 3.800 personas que trabajan en minería y 3 de cada 10 son mujeres; esto, debido en parte al exigente ambiente de trabajo en el que se desarrolla la actividad y a la existencia de prejuicios o cuestionamientos de la capacidad física e incluso intelectual de la mujer. Se suma además, la actitud de rechazo por supersticiones, como la pérdida de mineralización por el ingreso de la mujer a una bocamina, o la atribución de mala suerte por su simple presencia; y, aunque estos mitos poco a poco han sido derrumbados a medida que la igualdad de género y la técnica han ganado terreno, aún existen creencias respecto a la incompatibilidad de la minería y sus modalidades de trabajo, con el rol de la mujer. 

“De acuerdo con cifras del Ministerio de Energía y Recursos Naturales No Renovables, los productos mineros en febrero de 2021 alcanzaron el tercer lugar en las exportaciones no petroleras, con 210 millones de dólares en ventas.”

Según el Global Gender Gap Report de 2021, de un total de 156 países, Ecuador ocupa el lugar 42 en criterios relativos a la economía, política, educación y salud. Esto quiere decir que el país se encuentra dentro de los 80 países con menores tasas de equidad de género. Sin embargo, nuestro país está mejor posicionado que Colombia (59) y Perú (62).

Según el portal Rumbo Minero Internacional, el ranking de participación de la mujer en minería a nivel mundial está liderado por Canadá (17,9%), Australia (16,6%) y Brasil (13%). Por otro lado, Chile, país minero y referente de esta actividad en la región, muestra datos preliminares del estudio “Fuerza Laboral de la Gran Minería Chilena 2021 – 2030”, donde la participación de la mujer en empresas mineras alcanza al 2021 un 12,2%, mientras que en Ecuador no se tienen estadísticas claras del porcentaje de mujeres que trabajan en la industria minera. Según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (2010), solo seis de cada 10.000 mujeres trabajaban en la explotación de minas y canteras a nivel nacional, bajo relación de dependencia; esta cifra no consideraba a aquellas mujeres que laboraban de manera independiente. 

En algunas provincias del país, la participación de las mujeres en el sector minero representa una oportunidad para tener un empleo de calidad, generar ingresos y ejercer su autonomía económica, al mismo tiempo que realizan un aporte a la productividad e innovación del sector, contribuyendo al desarrollo sostenible y a una mayor igualdad; una muestra de ello, son las mujeres jancheras de las provincias de Azuay, El Oro y Zamora Chinchipe, que se dedican al reciclaje de minerales en escombreras de minas subterráneas y plantas de concentración en minería aluvial. 

La mujer en la minería desarrolla un rol activo y dinámico, participa en la toma de decisiones, en el control y supervisión de la operación minera, en plantas de beneficio o en la comercialización. Existen mujeres dueñas de minas o plantas de procesamiento de minerales que administran sus negocios de manera ágil, responsable y sostenible. A su vez, las mujeres tienen una fuerte presencia en actividades complementarias; por ejemplo, en la comercialización de insumos para mina, provisión de alimentos y bebidas, incluso insumos y equipos. 

“Las mujeres jancheras de las provincias de Azuay, El Oro y Zamora Chinchipe, se dedican al reciclaje de minerales en escombreras de minas subterráneas y plantas de concentración en minería aluvial.”

La presencia de la mujer es indispensable en el desarrollo de la sociedad, además de relevante; por ello, es prioritario fortalecer la diversidad de la fuerza laboral, aumentando la proporción de mujeres en el sector minero, posibilitando el incremento de la productividad laboral como también el fomento de la innovación del sector. En este sentido, algunas empresas reconocen que los equipos mixtos alcanzan mejores resultados, se rompen estereotipos y barreras con la incorporación de mujeres en el sector minero, lo cual debería ser replicado a nivel nacional y así, abrir nuevas oportunidades en este y otros sectores de la economía, en los cuales persisten similares niveles de rezago. 

Como ejemplo de impulso de equidad de género surgió en Reino Unido la iniciativa Women in Mining (WIM), que al momento tiene 50 países participantes y entre ellos está Ecuador. Esta organización tiene como objetivo “generar y apoyar iniciativas para mantener y promover la participación de la mujer en la industria minera” y, su meta principal es, alcanzar la igualdad de oportunidades y lograr que la participación de las mujeres pueda desarrollarse en áreas administrativas, técnicas, operativas y gerenciales. Por su parte, el Instituto de Investigación Geológico y Energético como aporte a la equidad de género cuenta con un 33.85 % de mujeres en las diferentes áreas técnicas y administrativas, las cuales desarrollan actividades de campo, lideran y coordinan grupos de trabajo y desarrollan estudios e investigaciones relacionadas a geología y energía. 

En Ecuador, el Plan Nacional de Desarrollo del Sector Minero 2020 – 2030 no contempla políticas ni planes de diversidad e igualdad de género. Se ha avanzado mucho en la inclusión de la mujer en el ámbito minero, pero aún se puede hacer más. Queda claro que es imperante diseñar, ejecutar, propender y apoyar programas e iniciativas de equidad de género con un sentido amplio y vinculante para todos los actores sociales y económicos. 

El Estado debe velar por las buenas prácticas laborales y la armonía de la vida familiar y personal, generando políticas laborales y sistemas de trabajo que se adapten, de mejor forma, a la naturaleza de la actividad minera y sus particulares diferencias de localización, sin que ello signifique una precarización laboral de la mujer. El desafío de las políticas públicas en este sentido, es lograr que la igualdad de género sea comprendida y asumida por las autoridades y dirigentes empresariales, como condición para el desarrollo del sector. Estas acciones y políticas deben tener como objetivo contribuir a un Ecuador más justo y cuyos resultados se reflejen en una mayor valorización de la presencia femenina, tanto en las labores mineras como en las mesas donde se toman las decisiones de esta industria, que constituirá uno de los pilares del desarrollo de nuestro país. 

El Instituto de Investigación Geológico y Energético (IIGE), le invita a participar en una ENCUESTA DE PERCEPCIÓN. 

El objetivo de la encuesta es recibir sus comentarios para comprender de mejor manera su percepción y expectativa que nos permitan entregar un producto y servicio óptimo. 

Agradecemos su participación.

https://forms.gle/XokW7e78WuKeTwmW7