Las deudas de Tame ponen en riesgo sus últimos días de funcionamiento

Petroecuador exige el pago de más de 156 millones de dólares. Podría dejar de distribuir gasolina para la aerolínea

La plantilla de la aerolínea estatal está conformada por más de 900 trabajadores. Archivo Expreso

Más males rondan a la aerolínea estatal Tame. Al anuncio del presidente de la República, Lenín Moreno, de liquidar la empresa por las cifras negativas que arrastra se agrega el cobro de deudas acumuladas desde el gobierno anterior. La falta de pago pone en riesgo los pocos días que se mantendrá en operaciones la línea aérea.

Tame podría perder el combustible para sus aviones sino cancela más de 156 millones de dólares de forma inmediata. Petroecuador, proveedor del producto a escala nacional, advirtió esa posibilidad en una carta enviada desde la gerencia, el 21 de mayo.

¿Cómo se llegó a una deuda millonaria? El problema es de larga data. Desde el gobierno anterior, Tame acumuló deudas y déficit en sus cuentas en parte, porque entidades manejadas por el expresidente Rafael Correa y su equipo cercano usaron los servicios aéreos pero no pagaron por ellos. La Presidencia de la República incluso figura entre los principales deudores que tenía la estatal aérea.

La empresa pública Petroecuador trató de encontrar un mecanismo de pago desde años atrás. El año pasado incluso se pidió un plan de pagos para no afectar a Tame ni a las necesidades de recursos que tiene la petrolera. Hubo un progreso limitado.

Pablo Flores, gerente general de Petroecuador, explicó en la carta enviada a la gerencia general de Tame que no ha recibido ninguna comunicación “ni propuesta de pago por parte de la empresa pública Tame”.

La falta de respuesta provocó que Petroecuador anuncie que se procederá con la emisión de las “Órdenes de Cobro y Títulos de Crédito para iniciar los procesos de cobro de los valores correspondientes, incluyendo los intereses de mora, cuya estimación definitiva se hará cuando se determine la fecha efectiva de pago de la obligación”.

Es decir, la deuda entre las estatales podría ser aún mayor ni está cuantificada.

Es mi deber, dijo Flores, “precautelar los intereses de Petroecuador”. Eso implica iniciar los procesos de cobro de los valores correspondientes por la vía coactiva.

No es la única coactiva que anunció en estos días Petroecuador. La petrolera anunció actividades similares contra Seguros Sucre por una deuda pendiente de más de 32 millones de dólares.

Como con Tame, Petroecuador pidió el pago a Sucre por medio de cartas y comunicados pero no ha tenido una respuesta oficial.

La urgencia es mayor, sin embargo, con Tame. El escenario empeoró luego del anuncio de Moreno de liquidar la aerolínea pública. Ahora no solo se tratará de emitir títulos para el cobro sino que se podría suspender el servicio de entrega de gasolinas.

Eso lo permite la normativa interna de la estatal de hidrocarburos. Los despachos de combustible, dice la misiva dirigida a Miguel Reyes que ejercía la gerencia de Tame, “únicamente pueden realizarse a clientes que no tengan deudas vencidas o hayan suscrito los convenios de pagos respectivos, y los estén cumpliendo, por lo que nos vemos obligados a analizar una posible suspensión de los despachos de combustible a su representada”.

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