Cueva de los Tayos, un atractivo turístico misterioso en medio de la selva

Esta fascinante formación geológica se encuentra ubicada en la provincia de Morona Santiago, en la zona montañosa conocida como la Cordillera del Cóndor

Cueva de los Tayos, un atractivo turístico misterioso en medio de la selva / Foto: El Oriente

Llena de enigmas y misterios, la Cueva de los Tayos ha despertado la curiosidad de arqueólogos y aventureros. Esta fascinante formación geológica se encuentra ubicada en la provincia de Morona Santiago, en la zona montañosa conocida como la Cordillera del Cóndor.

Su nombre (los Tayos) proviene de las aves nocturnas que habitan dentro de ella. Estas aves son familia del Búho llamado Tayo (Steatornis caripensis), existiendo muy pocas cuevas que alberguen a esta especie.

Esta formación data aproximadamente de hace más de 200 millones de años. Su impresionante forma, en medio de la selva ecuatoriana virgen, se ha convertido en uno de los atractivos turísticos más misterioso de la Amazonía ecuatoriana.

Para la comunidad indígena shuar, esta cueva es de gran relevancia en sus vidas, ya que se encuentra ligada a su cultura. Allí se realizan rituales en donde se prueba el valor de los indígenas conectándose con sus ancestros.

Su interior se encuentra formada por estalagmitas, terrazas impresionantes, cascadas, pasadizos y filtraciones de agua que ha formado a lo largo del tiempo diversas cámaras subterráneas. Y para su ingreso se debe descender 63 metros de profundidad haciendo su acceso de gran dificultad.

La Cueva de los Tayos se hizo famosa en 1976, cuando los gobiernos de Ecuador y Gran Bretaña financiaron grandes expediciones espeleológicas, en donde se realizaron importantes hallazgos arqueológicos. En una de estas expediciones estuvo presente el astronauta estadounidense Neil Armstrong.

Se ha publicado muchos artículos en donde se afirma que se encontraron planchas metálicas con grabaciones sobre la historia de la humanidad. Dichas hojas metálicas siguen generando grandes debates de escépticos y creyentes, sin tener aun una base científica en la que se pueda apoyar dichas teorías.

Es sorprendente cómo el mundo ha puesto los ojos en esta cueva. Aunque han pasado decenas de años desde que la descubrieron, todavía no se llega a conocer la magnitud de su importancia científica e histórica para la humanidad.