Acción de protección busca frenar el proyecto minero Curipamba

El 19 de enero, el MAATE concedió la licencia ambiental a las empresas canadienses Adventus Mining y Salazar Resources

El proyecto minero de mediana escala está ubicado en Bolívar / Foto: cortesía Minergia

Quito- Habitantes de las comunidades de Buenos Aires, Bellavista y Jerusalén, del cantón Las Naves, en la provincia de Bolívar, presentaron al juez cantonal una acción de protección contra el Ministerio de Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE). Buscan dejar sin efecto la licencia ambiental del proyecto minero de $ 293 millones, Curipamba.

El 19 de enero, el MAATE concedió a las empresas canadienses Adventus Mining y Salazar Resources, operadoras del proyecto, la licencia ambiental, que les faculta para la construcción de la mina.

Los demandantes aducen, entre otras cosas, que el proceso de consulta ejecutado por el MAATE vulneró su derecho a la participación y el propio derecho a la consulta ambiental, pues, no se generó un proceso de construcción conjunta con el gobierno municipal y la comunidad para determinar quiénes debían ser consultados.

Según consta en la acción de protección, la consulta ambiental para el proyecto se habría realizado en las poblaciones del área de influencia directa: Esperanza Alta, Esperanza Baja, Naves Chico, El Panecillo, Selva Alegre y Unión El Progreso.

El ministerio no realizó la consulta en las comunidades rurales de Buenos Aires y Bellavista por estar fuera del área de influencia de la concesión, mientras que los habitantes de Jerusalén se negaron a participar en el proceso de consulta ambiental, con el argumento de que fue incompleto y sesgado.

Quienes presentaron la acción de protección piden como medidas de reparación dejar sin efecto la aprobación del estudio de impacto ambiental y la concesión de la licencia ambiental, requisito indispensable para iniciar la construcción de la mina.

De acuerdo con cálculos de las operadoras, Curipamba generará $ 376 millones entre impuestos y regalías para el Estado. Durante la etapa de construcción, se crearán 800 empleos directos y alrededor de 3.000 indirectos.