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Ciencia y Tecnología
Eficiencia energética en la pesca artesanal
La eficiencia energética es decisiva para la competitividad, la seguridad del suministro de productos y como estrategia para reducir el uso de combustibles derivados del petróleo.
La eficiencia energética es decisiva para la competitividad, la seguridad del suministro de productos y como estrategia para reducir el uso de combustibles derivados del petróleo. Según la Comisión Europea, la pesca es el método de producción de alimentos más energéticamente intensivo que existe en el mundo, y depende casi exclusivamente del empleo de motores que operan con diésel o gasolina. La Junta Nacional de Defensa del Artesano (JNDA) define a la actividad artesanal como la practicada manualmente para la transformación de la materia prima destinada a la producción de bienes y servicios, con o sin auxilio de máquinas, equipos o herramientas; siendo la pesca artesanal, una de las 185 ramas artesanales reconocidas por esta organización. En Ecuador, la mayor parte del consumo de combustibles fósiles en el sector artesanal se presenta en labores de pesca. Según el Balance Energético Nacional del Ecuador, en el 2019 se despacharon para actividades de pesca artesanal, 1´005.097 barriles de hidrocarburos (BBL), equivalentes al 1,72% del total despachado. Este valor, aunque no parece significativo, toma importancia al considerar que los sectores Agro, Pesca y Minería demandaron en conjunto el 1,2% de toda la energía utilizada en el país durante el 2019, donde la actividad pesquera artesanal es una de las fuentes principales de consumo.
“Según el Balance Energético Nacional del Ecuador, en el 2019 se despacharon para actividades de pesca artesanal, 1´005.097 barriles de hidrocarburos (BBL), equivalentes al 1,72% del total despachado.”
La Federación Nacional de Cooperativas de Pesca del Ecuador (FENACOPEC), estima que la pesca artesanal genera anualmente, en promedio, 100 millones de dólares en exportaciones, que corresponden a cerca del 10% de las exportaciones del sector pesquero. La flota artesanal del país consta de aproximadamente 18.000 embarcaciones y 54.000 pescadores, que en su gran mayoría operan en el mar dentro de la zona de 8 millas náuticas establecidas por ley para esta actividad. Las faenas de pesca artesanal se realizan comúnmente en botes o pangas (fibra de vidrio o madera) con motores fuera de borda a gasolina. Estos equipos son en mayor medida, menos eficientes que los motores a diésel de ubicación interna y tienen una menor vida útil. Conforme a datos del “Proyecto para el desarrollo de las comunidades pesqueras de la República del Ecuador” de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), un motor fuera de borda de dos tiempos a gasolina, consume en promedio 230% más combustible que un motor diésel interno. Si además, se considera que el costo del combustible representa entre el 60% y 80% de los costes de operación en las faenas de pesca (embarcaciones de fibra), la sustitución de los motores fuera de borda a gasolina, por motores diésel internos, supondría un ahorro significativo de dinero, así como, una buena estrategia de eficiencia energética para reducir el consumo de combustibles fósiles y la emisión de gases de efecto invernadero.
“Los motores fuera de borda a gasolina son menos eficientes que los motores a diésel de ubicación interna y tienen una menor vida útil.”
El hecho de que los motores diésel tengan un costo considerablemente superior al de los motores fuera de borda, podría limitar esta iniciativa, ya que su beneficio económico se vería reflejado a largo plazo. Circunstancia que desalentaría a muchos pescadores de bajos recursos a incurrir en esta inversión. Motivo por el cual, el Estado debería facilitar la adquisición e instalación de estos equipos mediante la reducción de aranceles para su importación o entrega de créditos productivos.
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